Caída libre Dado el cielo de las caídas, yo quiero caer, lluvia sobre tu cara, levantada de las pestañas de un grupo de sueños, danzantes con ritmo sobre tus ojos de pocos lugares comunes y de risas de antojos. Ni siquiera una cama de paja Un suspiro que duele es un respiro en aprensión, es dolor en el costado de una tierra chupada, sin carne, sin pupila en un presente pobre, sin nitidez. Ni siquiera una cama de paja entre nosotros, sólo bancos de nubes de una frase, de una palabra que corre por una tangencial sin fondo, persiguiendo un sueño sin ruta. Las historias de vida son imágenes que no van a fuego, que pierden la verdadera voz, son resacas de sentimientos que en solitaria me llenan de mal humor, que no me tocan cuando en verdad quisieran. Me doy cuenta de que suspiro y duele, en la palabra veo el alma en la voz veo el hombre, pero todo está deshabitado porque entre tú y yo ni siquiera una cama de paja.